martes, 3 de diciembre de 2019

Alma.

A veces. No muchas veces. Solo algunas. sobrevuelo entredormido sobre cada una de las cosas que van y fueron pasando a lo largo de mi vida. Cuánta suerte. Que agradecido estoy. Leo de todo. Hice bien en dejar los comentarios habilitados. Tener la madurez suficiente para recibir una caricia con cariño y un regaño con hidalguía y respeto, es señal inequívoca de que el camino se puso, al menos, interesante.
 A lo largo de mi vida de casi cincuenta Marzos, viví de todo. No Todo. De todo. Felicidad Absoluta, Terror absoluto, miedo total, alegría intensa. Horror y espanto, Indignación aplastante, Amor profundo, incondicional y eterno. Vi a los ojos a quienes Amé y a quienes Amo. Me equivoco como todos, y me equivoco a veces por tanto que me sorprendo. Como si me equivocara tan fiero a propósito. Pero es porque hago muchas cosas..Y me gusta. Como que insistí a ver si por ahí... y al pasto de cabeza. Bueno..
 Y me veo hoy Padre, Hermano, Hijo, Esposo. Y veo que voy tachando pequeños deseos, que guardados en el alma son chiquitos, pero fuera del cuerpo, llevados a cabo, se inflan como la vela mayor de la más grande fragata.
 Y me hace bien. Cuánto quilombo queda por delante. Que linda que es la vida, cuando se vive cada segundo con toda el alma.. con cada pedacito de alma. Hasta el final. Amén!